Muchas Cecilidades (II)

Con un año empecé a hablar (y ya le pillé vicio y nadie me pudo parar).

Con dos años me portaba bastante bien (mis padres creían que iba a continuar así).

Con tres años me fuí a vivir a 900 kms de donde había nacido (mi primera mudanza).

Con cuatro años empecé el colegio y le dí una patada a la profesora nada más entrar a clase (ese sería el comienzo de mi mala relación con los maestros)

Con cinco años empecé a aprender inglés, en clases extraescolares. (Mi primera W fue inglesa, siempre las pronuncio como si lo fueran)

Con seis años escribí mi primera hoja de reclamaciones (el destinatario era Dios).

Con siete años me di cuenta de que no me gustaba estudiar y me pegaba las clases haciendo manualidades y mirando por la ventana. (Me expropiaron millones de libretitas hechas de papel que ahora tendrían un valor incalculable)

Con ocho años me seleccionaron para hacer las medallas de barro que serían el valiosísimo trofeo de un concurso de canto del colegio.

Con nueve años empecé a suspender matemáticas y sociales (cosa que repetí durante los siguientes 8 años).

Con diez años gané un concurso de cuentos de mi colegio. Publicaron mi historia en "el periódico" y yo me sentí muy orgullosa.

Con once años una compañera de colegio me llamó desgraciada porque no llevaba ropa de marca. (Y ella era gilipollas)

Con doce años me bajó la regla por primera vez, no me sentí especial por ello, sólo pensé: qué putada...

Con trece años aún no me habían salido tetas, luego hicieron pop y ya no hubo stop.

Con catorce años tuve mi primer novio, lo dejé en cuanto se le ocurrió ponerme la mano en el hombro... el tío salido :-P

Con quince años decidí que no quería vivir más con mis padres y me largué de casa. (Volví dos días después)

Con dieciseis años suspendí cinco para septiembre y aprobé las suficientes para pasar al siguiente curso (como venía siendo costumbre..)

Con diecisiete años el costillo y yo ya andábamos zanganeando, aunque no teníamos nada serio (A día de hoy aún no me ha "pedido salir").

Con dieciocho años fuí delegada de mi curso por votación popular, gané un concurso de carteles y de poesía. Fué un año increíble en el que aprobé todo en junio.

Con diecinueve años fuí la primera de mi clase que aprobó electrónica analógica, alguno comentó sorprendido lo extrañado que estaba de que fuera una mujer.

Con veinte años me hice representante de alumnos y empecé a protestar con cargo.

Con veintiun años perdí a la persona que más me ha dolido, nunca podré despedirme de ella. La echo de menos.

Con veintidos años conocí internet, me quedaban dos asignaturas para acabar la carrera. (Y me costaron casi tanto tiempo como aprobar todo lo anterior)

Con veintitrés años me emancipé y empecé a trabajar con un contrato "serio".

Con veinticuatro años pagaba autónomos e Impuesto de Actividades Económicas (30 y pico mil pelas al mes de Seguro... aún me duelen)

Con veinticinco años, dejé todo y me fuí a vivir a Vigo donde empecé a trabajar en la empresa que aún me paga. (Ahora hecho de menos el mar).

Con veintiseis años empecé a comprarme una casa, aún estoy pagando la hipoteca..(Y estaré..)

Con veintisiete años decidí casarme, ni anillos, ni de blanco, ni por la iglesia... mariconadas las justas.

Con veintiocho años me puse gafas porque ya me picaban los ojos de tanta pantalla de ordenador. (Hoy me ha dicho el oculista que de momento no necesito ni perro ni palo)

Con veintinueve años había cambiado de jefe 4 veces en el mismo departamento, empecé a comprobar que todo esto del curro era un mamoneo donde sólo el más trepa consigue ascender.

Con treinta años empecé a escribir este blog, sin saber con que fin y pensando que lo iba a abandonar en poco tiempo.

Con treinta y un años, cambié de sector, de departamento y le dí un giro a mi carrera. Quiero pensar que ha sido una buena decisión.

Con treinta y dos años recién cumplidos, termino de escribir este tostón, encantada de la vida que he llevado, deseando que lo que queda sea por lo menos como hasta ahora y confiando en que lo peor ya me haya pasado.

PS: Gracias por las felicitaciones, públicas y privadas, todas me hacen sonreir. Gracias por vuestros halagos y gracias también por las críticas, de todo se puede aprender y mejorar. La mala noticia es que seguiré por aquí mientras pueda :)